No los hay de todos los modelos ni de todas las métricas que habitualmente se encuentran en centros de bricolaje y ferreterías. Y si los hay, en muchos casos están tardando en llegar (salvo casos de sobreaprovisionamiento), principalmente en el caso del pequeño comercio. Y esto es debido a que la escasez y el sobrecoste de las materias primas también está afectando a otro de los básicos del sector de la ferretería y el bricolaje: los tornillos.
Aunque su suministro no está presentando los problemas que se están produciendo en el caso de las siliconas, hay muchos establecimientos que se están viendo afectados por la falta de tornillería de diferentes métricas o tornillos para chapa autotaladrante, según han contado algunos ferreteros a C de Comunicación.
La escasez de magnesio y de otros componentes como el acero, claves para la fabricación de tornillos, está provocando roturas de stock en algunas familias de producto que, si bien es cierto que no son generalizadas, sí están dificultando el día a día en determinados comercios de proximidad como las ferreterías.
“Las confirmaciones de los proveedores ahora no son fiables”
Algunos fabricantes del sector consultados por C de Comunicación, como Index, Spax o Grupodesa, ponen sobre la mesa diferentes valoraciones sobre lo que está ocurriendo y sobre lo que está por venir. Mientras que unos, como Index, hablan de “incertidumbre”; otros, como en el caso de Grupodesa, consideran que “ya se vislumbra la luz al final del túnel”. El precio del acero está bajando desde hace unas semanas, “y parece que va a seguir así”, señalan algunos de ellos.
Pero el problema al que se enfrentan ahora muchos fabricantes, y no sólo de tornillos, va más allá del precio; la disponibilidad de producto y la falta de fiabilidad en las previsiones de sus proveedores son, en estos momentos, el quid de la cuestión.
“Las confirmaciones que tenemos no son fiables -afirman-, porque las previsiones que teníamos de algunos productos que iban a entrar ahora… no se están cumpliendo”. Esos retrasos, que podrían repetirse en el futuro, son el principal quebradero de cabeza al que se están enfrentando muchos fabricantes.
Los proveedores cuya producción se encuentra en Europa respiran más tranquilos. No tienen que hacer frente a los problemas logísticos vinculados a la crisis de los fletes y los contenedores, “pero sí a los problemas de producción”, porque se han encontrado con una “demanda desorbitada” a la que no han podido dar respuesta.
“Parece -subrayan algunos fabricantes- que esa demanda se está frenando, por lo que el siguiente paso podría ser… ver quién baja los precios primero“.
Ikea y Leroy Merlin, sin problemas de stock
En el caso de grandes superficies como Ikea o Leroy Merlin, el sobreaprovisionamiento que llevaron a cabo hace meses ha facilitado las cosas. En Ikea, por ejemplo, y según explican a C de Comunicación fuentes de la compañía, la problemática de no tener surtido “se ve minimizada”, gracias, precisamente, a las acciones que llevaron a cabo para “priorizar los productos más vendidos y relevantes para el consumidor“, entre ellos los tornillos.
Además, el 70 % de sus productos ya proviene de Europa, “por lo que la dependencia de Ikea de Asia es mínima“, y, en cualquier caso, la familia de tornillería no se está viendo afectada.
Algo parecido ocurre en Leroy Merlin. Las fuentes de la empresa consultadas por este medio aseguran que disponen de “un catálogo muy amplio de marcas, donde la posibilidad de que exista alguna incidencia puntual en un determinado producto, si fuera el caso, podría ser solventada sin problema con el mismo producto pero de diferente marca“.
También señalan desde la compañía que mantienen relaciones con sus proveedores “a largo plazo”, por lo que les avisan “con bastante margen de tiempo de cuáles serán los pedidos, para que ellos puedan planificarse y contar con la disponibilidad de productos y soluciones requerida por los clientes”.
“Esperemos no llegar a una situación límite”
Así las cosas, insisten los fabricantes de esta familia de productos en que no se deben desestimar los distintos factores que están influyendo en estos momentos en la red logística mundial y, por tanto, en la propia cadena de suministro.
“Según la información de nuestra red de venta, que está en la calle y en contacto con ferreterías y otras marcas de nuestro sector -añaden las fuentes consultadas-, se encuentran con problemas tanto de suministro como de logística (fletes, navieras, etc.), lo cual provoca plazos de entrega desorbitados, debido a la escasez de materia prima y una demanda más elevada de lo habitual”.
Si a eso se le suma que Malasia, otro gran exportador de productos básicos para el sector de la ferretería y el bricolaje, cuenta con empresas que están trabajando al 50 % de su capacidad, por los contagios de COVID-19 que se han producido… el problema está servido, y habrá que esperar, como afirman algunos fabricantes, “que no lleguemos a una situación límite como está ocurriendo con otras familias de productos”.
