La reducción de la jornada laboral es un hecho. Con el límite del 31 de diciembre para abordar la reducción de jornada a 37,5 horas semanales, las empresas deben comenzar a reestructurar sus horarios y equipos para adaptarse a esta reforma.
Este es el caso de Suministros Intec, que ha comenzado a aplicar una jornada de 37,5 horas semanales, alineándose con las demandas de conciliación y bienestar laboral que se discuten en el mercado.
La adopción de modelos de trabajo con menos horas sin afectar las condiciones salariales plantea interrogantes sobre su impacto en la productividad, la competitividad y la sostenibilidad de las empresas. A medida que estas prácticas ganan terreno, el debate en el sector se intensifica.