Es raro que, en eventos o mesas redondas de las que organizamos en este sector, no salga el tema de la opacidad de los números que rodean a estas economías de nicho.
Todo el mundo, especialmente los recién llegados, se sorprenden de que tengan que manejarse con tan pocos datos y que, casi, deban chuparse el dedo y sacarlo por la ventana para saber de dónde sopla el viento en sus familias de producto. AECOC ha sido de las organizaciones que más han contribuido a mejorar esta situación y AFEB va también cada vez más por ese camino. De cualquier manera, seguimos lejos de la fotografía óptima.
La consecuencia es que cada vez que mis clientes, las marcas, se encuentran en el espacio/tiempo sea habitual que se pregunten cómo están sus relaciones con los diferentes grupos de distribución. Necesitan datos, obviamente, para tomar las mejores decisiones para sus empresas.
En el marco de nuestro I Congreso Summind, celebrado el pasado jueves, en los corrillos era Industrial Pro la protagonista de las elucubraciones. ¿Has firmado plantilla con ellos? Ésta era la pregunta más recurrente.
35 suministros españoles, 3 portugueses y el acuerdo con Synergas, convierten a Industrial Pro en un actor relevante
Desde luego entiendo que los datos sensibles para los acuerdos comerciales no sean públicos pero me cuesta entender Cristina Menéndez que, una organización tan joven, siga ocultando a los medios el número de suministros que se han sumado a su proyecto. Especialmente, cuando la cifra de 35 negocios españoles + 3 portugueses + el acuerdo con Synergas convierte a Industrial Pro en un actor más que relevante si tenemos en cuenta que apenas lleva dos años en el mercado. Si yo fuera Industrial Pro lo contaría a los cuatro vientos.
En el lado opuesto, un negocio online como el de Alberto Torrón, de Incremental y Todo Taladros que en nuestro Congreso Summind no tuvo ningún reparo en hablar de su ticket medio, del pedido más alto o de sus ventas por países.
Estamos en el siglo XXI y ocultar información sirve de poco.
Una recomendación en Valencia para quedar muy bien en la mesa. Restaurante Blauet
Espero que en Synergas queden personas competentes y sepan reaccionar antes de que sea demasiado tarde, los socios no se merecen esto.
Gracias Fernando por participar en el blog. La pelota queda en el tejado de Synergas.
Cuando lo que se vende es humo, resulta complejo medir y aportar datos. Una cosa es si es segura, el humo pesa poco.
Gracias por opinar Ricard. Interesante visión desde del punto de vista físico.
El problema de la opacidad es que todos esos suministros están asociados a otro grupo de compras y temen que los puedan sacar de ahí
Pues ahí queda tu reflexión Miguel. Bien tirado.