EDRA, la asociación europea de distribuidores de bricolaje, junto con GHIN (red global de mejora del hogar), ha emitido un comunicado en el que analiza el papel esencial que desempeñan ferreterías y centros de bricolaje durante la actual crisis sanitaria.
En dicho comunicado, las asociaciones señalan:
“EDRA/GHIN apoya inequívocamente los numerosos cierres que se están produciendo en casi todo el mundo, que afectan a cerca del 20 % de la población mundial en este momento. El cierre de los servicios públicos y las crecientes políticas de distanciamiento social están ralentizando el ritmo de crecimiento del COVID-19. EDRA/GHIN también cree que es correcto cerrar temporalmente todas las tiendas, con la excepción de las de alimentos, farmacias, bancos y otros servicios considerados esenciales.
Creemos apasionadamente que los establecimientos de mejoras para el hogar también deben ser clasificadas como esenciales. Las tiendas de nuestros miembros venden artículos esenciales como equipos eléctricos, de calefacción y de fontanería, a los que los clientes necesitan acceder. Además, muchas ferreterías y centros de bricolaje también venden productos que actualmente tienen una gran demanda (lejía, productos de limpieza/desinfectantes, mascarillas, etc…). Por último, dado que los gobiernos apelan cada vez más a la población mundial para que permanezca en sus hogares, es aún más importante que estos hogares sean funcionales y presenten un entorno de vida seguro.
EuroCommerce, la voz del comercio minorista europeo en Bruselas, apeló -en su comunicado de prensa de la semana pasada, el 18 de marzo,- a los gobiernos de la Unión Europea para que consideraran la posibilidad de mantener abiertas las tiendas de bricolaje, aunque con algunas restricciones. Algunos gobiernos han instalado medidas restrictivas para hacer frente a COVID-19 y, sin embargo, han reconocido que el sector del bricolaje es un comercio esencial que debe permanecer abierto.”
El secretario general de EDRA/GHIN, John W. Herbert, explica que la principal prioridad consiste en proteger la salud y la seguridad tanto de clientes como de empleados. “Estamos seguros de que, si instalamos las medidas de restricción pertinentes, por ejemplo, reduciendo el número de clientes en las tiendas en un momento dado y asegurando que se respeta el distanciamiento social, esto ayudará a proteger la seguridad personal de los clientes y empleados y dará a los clientes la oportunidad de mantener sus hogares”.
Además, EDRA/GHIN pide a la Comisión Europea que suspenda la aplicación de nuevas normas de la Unión Europea que no estén directamente relacionadas con la pandemia, con el objetivo de evitar nuevas obligaciones que obstaculicen su capacidad para enfrentarse a esta crisis.
