La Guardia Civil ha retirado cerca de 400.000 pilas falsificadas, con un valor de mercado de unos 390.000 euros, que estaban a la venta en cinco empresas de Sevilla. La investigación, denominada ‘Operación Lithium’ e iniciada a mediados de febrero de este año, se ha saldado con nueve personas investigadas.
Según han informado desde la Guardia Civil, el operativo comenzó cuando se tuvo conocimiento de la presencia, en determinados comercios de venta al por mayor, de pilas falsificadas de una conocida marca japonesa.
A partir de ahí, los agentes realizaron cinco inspecciones en empresas de la provincia de Sevilla, que, según ha explicado a C de Comunicación un experto en estos productos, podrían tratarse de “almacenes multi-precio”.
Los agentes contrastaron la información recopilada con la marca perjudicada y determinaron que los productos eran falsos, por lo que los investigadores realizaron un ofrecimiento de acciones a los afectados.
La Guardia Civil recuerda que la adquisición de este tipo de material falsificado puede suponer un riesgo para la salud de los consumidores, ya que se fabrican con metales pesados como plomo, cadmio o mercurio, sin ningún tipo de control estipulado, no pudiendo certificar la calidad en su fabricación.
Las pilas falsificadas, en el foco policial
Las autoridades policiales tienen el foco en la venta de pilas falsificadas, tanto por su impacto en la salud como en materia de propiedad industrial. En los últimos meses se han notificado hasta dos operaciones relacionadas con la venta de pilas falsificadas.
La más reciente, del pasado 16 de abril, se produjo en un polígono industrial de Valladolid, donde una inspección de agentes de la Guardia Civil logró detectar e intervenir 1.180 pilas falsificadas.
OtrA operación, de mayor calado, se produjo en enero de este año, cuando la Guardia Civil requisó unos 32.500 pilas falsificadas en la localidad turolense de Alcañiz.
