Determinadas gamas de jardín van cogiendo peso, de forma aún tímida, en las ferreterías. Y durante la VIII Mesa redonda de jardín, organizada por C de Comunicación el pasado 19 de octubre, se señalaron dos de la barreras que impiden una mayor penetración del jardín en estos comercios: la falta de espacio y la estacionalidad de los productos.
Pese a todo, los participantes señalaron que las ferreterías están apostando paulatinamente por incorporar productos de esta categoría, que puede tener un interesante recorrido fuera de las grandes superficies de bricolaje o los gardens más especializados.
De hecho, Javier Gil-Vernet, gerente de Jardinarium, tiene claro que “si queremos que crezca el jardín, cuanto más se generalice, mejor”, por lo que no teme que las ferreterías apuesten por estas gamas, ya que “si encuentran su foco o nicho de mercado y se enfocan en el consumidor, tienen mucho desarrollo“.
Xavier Merino, director general de Sipcam Jardín (Vithal Garden), está de acuerdo en que “las ferreterías tienen aún un potencial de desarrollo increíble” dentro del mundo del jardín.
Un mercado con recorrido, como lo demuestran los dos canales en los que, a juicio de Xavier, más ha crecido el jardín: los bazares multiprecio y los supermercados de surtido corto, que están apostando “de forma brutal” por la planta y los productos de la categoría. “Están demostrando que el jardín en la proximidad sí tira”, subraya.
Por su parte, Carlos del Piñal, director general de Husqvarna Consumer (Gardena), concuerda en que las dos barreras principales para que la ferretería no se lance a incorporar más gama de jardín son el espacio y la estacionalidad.
“En el tema del espacio, habrá que buscar soluciones, de cara al consumidor final, para visibilizar productos que son muy caros tenerlos en la tienda física pero que, de alguna manera, se puedan mostrar”, explica Carlos. Por otro lado, señala la estacionalidad de estos productos frente a otros, más habituales en ferretería: “una llave o tornillo los vendes todo el año, pero una manguera de jardín son tres meses al año”, subraya.
En esta misma línea, Juan Carlos Albín, director corporativo de Estrategia de Catral Group, destacó que “debido al tamaño de la propia tienda y de ciertos productos es complicado tenerlos en la tienda”, pero cree que “la oferta atractiva sí está seleccionada como solución en el folleto“.
Omnicanalidad y soluciones digitales
Como señala Javier Gil-Vernet, el problema principal del físico es “el espacio”, por lo que cree que la solución pasa por la omnicanalidad. “Hay muchos elementos aplicables, el problema es que son muy caros”, reconoce Javier.
Por su parte, Javier Giménez, responsable de producto de Coferdroza, también cree que “el sitio es el problema” de las ferreterías, así como el importe de los que se va a comprar. Pese a todo, explica que hay algunos proveedores que ya apuestan por lo digital, y en concreto por la realidad virtual, como “una ayuda a la venta” y una forma de superar la barrera del espacio en tienda.
Eduardo Asensio, jefe de producto de Cadena 88, cree, en todo caso, que herramientas como “la realidad aumentada funcionan con la prescripción del ferretero, por la confianza que le merece y el expertise que tiene”.
Por su parte, Fran Salgado, cree que las grandes superficies de alimentación “también se han metido en jardín por el espacio, y te montan 400 o 500 metros dedicados al mueble”, lo que ha afectado también a las ferreterías. “A todos los socios les encanta el mueble de jardín, ¿pero cuántos pueden ponerlo?“, reflexiona Fran.
De todos modos, Ricard Mulá, director de producto de NCC, cree que la tendencia de las ferreterías a incorporar gamas de jardín puede ir en aumento, y lo ejemplifica con que la categoría de mueble de jardín “no ha dejado de crecer”. “No siempre son los socios grandes los que venden mueble, a veces es por capilaridad”. Clientes que lo ven en Leroy Merlin y van a comprar el mueble en su ferretería de confianza”, explica Ricard”, explica Ricard.
