Hablar de seguridad es siempre complejo por su amplitud, por su alcance y porque afecta directamente a nuestra ferretería. Es fundamental entender que la seguridad debe estar presente en todo y para todos, tanto en lo que tiene que ver con nuestro punto de venta como con la actividad comercial que se lleva a cabo.
Con seguridad nos referimos a la protección de los clientes cuando están comprando en nuestra ferretería, a la de nuestros empleados en su jornada laboral atendiendo a los clientes o descargando, a la de los productos por estar en mal estado -lo que genera unos daños o consecuencias que nos reclama un cliente-, a nuestras instalaciones por daños sufridos generados por nosotros mismos o por terceros, a nuestros vehículos comerciales o de reparto, etc.
Sin embargo, es un tema que, a pesar de su interés y su importancia, muchos establecimiento no le presentan atención ni cumplen con las más mínimas normas de seguridad. Algo que no solo ocurre en el sector ferretero, sino que es una despreocupación bastante habitual lo de cumplir con las normativas de seguridad. Y las consecuencias de ello son imprevisibles y muy costosas.
Aunque somos conscientes de que tener un seguro de hogar es obligatorio, y que forma parte de algo normal y necesario, curiosonamente casi un 62 % de los establecimientos no dispone de ninguna cobertura. Esto genera unos gastos inimaginables.
Accidentes por caídas de clientes
Por ejemplo, los accidentes por caídas de clientes en nuestras tiendas son muy frecuentes y hay muchos seguros que cubren los accidentes siempre que no sean por negligencia de la actividad. Pero también ocurren accidentes laborales de nuestro personal, que debe visitar la mutua laboral donde revisan su lesión y evalúan cómo ha ocurrido: y si lo sucedido se debe a una falta de aplicación de la normas laborales de seguridad se nos hace responsables y puede llegar a tener consecuencias incluso hasta penales.
También cuando hay una inundación en nuestra ferretería por la rotura de algún bajante de agua o un colector (cosa muy habitual en todos los locales que cuentan en su techo de una conexión de este tipo), las compañías de seguros de la comunidad del edificio cubren la reparación y los desperfectos a la instalación, pero los daños sufridos a productos que están fuera de las estanterías o directamente a nivel del suelo no quedan cubiertos.
Debemos contar con la valoración real de su coste y su justificación mediante la factura y que esté incluido en la relación del inventario de productos, debiendo de estar valorado en todo momento.
Ocurre también con los vehículos de reparto, que muchos accidentes son por motivos imprudentes que no se recogen o bien que el chofer no dispone de la experiencia o de los años mínimos para conducir este tipo de vehículo como norma por parte de la aseguradora y que figura en letra pequeña en la póliza.
Hay una larga lista de condicionantes para no pagar los daños generados o bien los daños sufridos, y que no quedan recogidos en la póliza de seguros. No existe la póliza o el seguro total, todos tienen limitaciones y matices, así como exigencias técnicas que si no se tienen en cuenta pueden suponer costes.
La seguridad, presente en todo
Por eso la seguridad debe estar presente en todo, en nuestro día a día comercial. Y debemos hacer lo imposible para que se cumplan todas la normas, tanto las obligadas como todas las preventivas que se pueda aplicar.
Esta garantía de seguridad es percibida por los clientes y también por los empleados. Por ello debemos invertir y preocuparnos por cumplir la totalidad de todas estas medidas, tanto para el bien de nuestros clientes como el de nuestros empleados y hasta el de uno mismo.
La seguridad no es algo que se elige al azar, sino que debe estar siempre activa para garantizar el bienestar de todos cuando cruzan la puerta de nuestra ferretería. Hay que revisar qué medidas cubrimos y aplicamos, así como el alcance de nuestras garantías de las pólizas que tenemos contratadas para cubrir cualquier contratiempo de accidente.
Sugerencias y comentarios:
- Debemos velar en nuestra ferretería por aplicar todas las medidas seguridad que sean necesarias.
- Hay que aplicar medidas preventivas para poder reducir y limitar cualquier tipo de accidente.
- Se deben analizar los condiciones y limitaciones de las pólizas de seguros que se tengan contratadas.
- Existen responsabilidades para la empresa y empresario que no cumpla y aplique las normas sobre seguridad que exigen las normativas actuales.
Autor: Antonio Valls
Antonio Valls, director general de SystemShop Consulting S.L. Autor del libro ‘F de Ferretería. Manual para la Ferretería del siglo XXI’.
Con más de 24 años de experiencia en gestión e innovación en el punto de venta, Antonio Valls es un apasionado del sector de ferretería y bricolaje.
SystemShop Consulting S.L. es una empresa especializada en la optimización e innovación en el punto de venta (retail). Busca y da soluciones efectivas a cualquier problema: imagen del establecimiento, ‘lay out’, formación del personal, imagen corporativa, gamas de producto, negociaciones con proveedores, gestión de compras, ‘mystery shopper’, implantaciones, iluminación, rotulación y señalización, escaparates, gestión del punto de venta, indumentaria, distribución interior, decoración interior del establecimiento, lógica de funcionamiento.
