La tienda de Bricorama en Valladolid (en Zaratán) volvió ayer a abrir sus puertas tras la grave inundación sufrida el pasado 23 de septiembre por la tarde, debido a la tromba de agua caída en la zona y que ha provocado grandes destrozos materiales.
El agua penetró en todo el establecimiento. En el almacén, una de las zonas más afectadas, el agua llegó más arriba de las rodillas. Gracias al despliegue y esfuerzo realizado por todo el equipo de Bricorama y de los servicios de evacuación y limpieza, la tienda ha podido reabrir ayer.
