TESA Assa Abloy apuesta por aumentar la seguridad gracias al nuevo escudo antiextracción, que se incluye en todas sus puertas de reposición desde septiembre. La puerta acorazada TESA Automática se caracteriza por su seguridad pasiva, que se consigue gracias a que, cuando la puerta se cierra automáticamente, se queda bloqueada por el punto alto y por el punto bajo.
Estos puntos tienen un disparador que, cuando la puerta está cerrada, salta automáticamente y se introduce dentro del marco de acero, lo que evita que se pueda utilizar una tarjeta para abrir el resbalón.
A ello se añade el nuevo escudo antiextracción, que está atrapado por la hoja, por lo que no se puede extraer. Además, dentro de la hoja va oculta una placa antitaladro para evitar ataques de taladro contra la cerradura.
Por otra parte, existe la posibilidad de cambiar el escudo antiguo en una puerta Premium, Automática o S1 mediante un kit.
