El Observatorio de Tendencias del Hábitat (OTH) ha localizado cuatro grandes tendencias cromáticas para el próximo año en cerámica, de las que se ha hecho eco la Asociación Española de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (ASCER). Algunos de los colores que marcarán la moda de 2025 son los colores tierra, tonos neutros y relajantes y, en el lado contrario, colores vivos y metálicos.
Las cuatro paletas cromáticas recogidas en el Informe de “Tendencias en superficies cerámicas 2025” del OTH son Geo-Primalism, Organic-Essence, Ultra-Dinamic y Extra-Ordinary.
Tendencia Geo – Primalism: se caracteriza por tonos neutros y terrosos, que evocan una conexión profunda con la naturaleza, con colores marrones, ocres, terracotas y beiges, que reflejan los matices del suelo y la piedra; verdes naturales y colores oxidados con rojos y naranjas, que imitan la oxidación natural de metales y arcilla.
Tendencia Organic – Essence: los colores se inspiran en la naturaleza para generar una atmósfera serena y relajante, con tonos tierra, verdes suaves, azules marinos y neutros cálidos como base fundamental.
Tendencia Ultra-Dinamic: una paleta de color con influencia retro. Destacan los tonos caramelo y azul retro que aportan una sensación vintage junto con el morado, lavanda y fucsia. Estas combinaciones logran un efecto de optimismo, dinamismo y autenticidad.
Tendencia Extra-Ordinary: en esta tendencia predominan las tonalidades inspiradas en la vida nocturna, la creatividad y la seducción, con colores brillantes, metálicos y dorados así como tonalidades oscuras y ceniza como el negro o el granate, que destacan por su elegancia cálida y sofisticada, y una paleta de azules profundos y oscuros, inspirados en mundos de fantasía marina.