Tras el incendio que afectó el pasado 15 de abril a la catadral parisina de Notre Dame, son muchas las empresas, tanto nacionales como extranjeras, y grandes fortunas del país que se han apresurado a anunciar importantes donaciones para la reconstrucción del templo gótico.
La Asociación Familiar Mulliez (AFM), considerada como la primera gran fortuna de Europa y a la que pertenecen enseñas relacionadas con el sector del bricolaje, la decoración y el hogar como Leroy Melrin, Bricomart, Zodio, Electro Dépôt, Boulanger, entre otros, ha anunciado la creación de una fundación para ayudar a la reconstrucción de Notre Dame, tal y como ha anunciado La voix du nord.