TESA ASSA ABLOY celebra este año su 75º aniversario. Comenzó su andadura en Eskoriaza (Guipúzcoa) bajo el nombre de “Talleres de Eskoriaza S.A.”, fabricando herrajes para maletas, aunque posteriormente experimentó un cambio en su trayectoria con una constante transformación, con el objetivo de adaptarse a la evolución de los mercados y de la sociedad.
Nace en 1947 y, en sus orígenes, fabrica cerraduras para la construcción, una línea que viene formando su seña de identidad hasta nuestros días. Las dos décadas siguientes, TESA afianza su presencia en el mercado nacional y se convierte en una gran compañía del sector. En 1967 inicia su expansión por Estados Unidos, Canadá y países latinoamericanos.
La inauguración de su fábrica en Irún como sede central de la compañía, a principios de la década de los sesenta, marca un acontecimiento importante en su historia. Instalaciones modernas acogen nuevas líneas de producción como la fabricación de pomos.
Un punto de inflexión importante en su recorrido es el lanzamiento de la primera cerradura electrónica, la HT10, en 1980, dirigida al sector hotelero. Un buen período en el que registró también su primer cilindro patentado, el T10.
En los años 90, la compañía siguió desarrollando su actividad en el sector de las cerraduras electrónicas para hotel y creó la división de Ingeniería de Accesos, centrada en elaborar planes de cierre con prescripción de productos propios. En 1994 se obtiene la certificación de calidad ISO 9001, completándose más tarde con la medioambiental ISO 14001.
Ya en el nuevo milenio cambia su nombre al de TESA ASSA ABLOY, tras su incorporación al mayor grupo multinacional dedicado a soluciones de cierre. Desarrolla nuevas tecnologías cada vez más innovadoras, lo que posibilita la realización de productos como la cerradura electrónica con tecnología Rfid para hoteles, la plataforma de control de accesos Smartairtm o la plataforma de dispositivos antipánico Mare Nostrum entre otros tantos. Todo ello coincidiendo con la expansión comercial con delegaciones en Dubai y Panamá.
En estos últimos años, la compañía ha avanzado en su catálogo de productos con incorporaciones como el cilindro TK100, el primero de alta seguridad con tecnología ‘Drop orbital’ y, paralelamente, ha acrecentado su relación con distribuidores y usuarios gracias a iniciativas como su TESA Academy (formación experta para especialistas) y una mejora en la comunicación.
Una trayectoria que quiere conmemorar este 2016 con una agenda de eventos, dirigida a clientes y empleados, que ponga en valor una historia empresarial de quince lustros.
Desde aquí, nosotros también queremos felicitar a Tesa, junto con Cisa una de las mejores marcas de cerraduras nacionales y con las que trabajamos con frecuencia en el oficio.