Amazon ha anunciado que, a partir del 1 de enero de 2025, modificará su política de devoluciones para ‘penalizar’ a los vendedores cuyos productos se devuelvan en masa o que tengan un elevado ratio de devoluciones.
Con esto, el gigante del comercio electrónico pretende poner freno al aumento de devoluciones de producto que comporta costes operativos para la compañía y genera residuos. En cualquier caso, de esta nueva política quedan fuera productos esenciales como ropa, gafas, zapatos o complementos.
La nueva política de Amazon afecta a ese periodo extra de devolución de 30 días que concede la empresa a los 14 días naturales que, por derecho, tienen los consumidores para desistir del contrato de compra.
La “nueva tarifa por procesamiento de devoluciones a los productos con una ratio elevada de devoluciones” se aplicará alos productos que superen un determinado umbral en función de cada categoría. Estos cargos empezarán a llegar entre el 7 y el 15 de abril.
Para calcular el umbral, Amazon tendrá en consideración el porcentaje de unidades enviadas y los que se devuelven entre ese mes y los dos naturales siguientes. Esto supone que la política no se aplicará a pequeños vendedores que envían menos de 25 unidades al mes.