Una visita a Saltoki

Hace unos días tuve la oportunidad de visitar el Saltoki de Getafe, de la mano del delegado de la zona Centro de la compañía y junto a parte del equipo de Climatización de C de Comunicación. Saltoki es uno de esos grandes distribuidores que, sin pertenecer al sector de ferretería, confluyen cada vez más con nuestro canal. Llevo años comentándolo con suministros industriales quienes, al principio, no veían motivo de preocupación en la expansión de Saltoki.

Pero que le pregunten a las ferreterías y suministros, con alto porcentaje de clientes profesionales, cómo es Saltoki en sus zonas de influencia y cómo les afecta.

En cualquier caso, la reciente visita me hizo reflexionar sobre un par de aspectos.

Saltoki tiene claro cuál es su cliente: profesional 100 %. En sus puntos de venta no hay precios a la vista: ningún producto se encuentra etiquetado. En Saltoki no se impide la entrada a usuarios particulares; de hecho, pueden comprar, si quieren. Pero sus precios finales no resultan competitivos para ellos, en un espacio pensado por y para el profesional.

Derivado de lo anterior, una de sus principales preocupaciones consiste en asegurar el futuro de los profesionales instaladores. Y, por ello, cuenta con un detallado plan de formación, tanto para nuevos profesionales que quieren empezar en el sector de la instalación como para los instaladores ya establecidos que desean ampliar conocimientos o actualizarse.

Saltoki tendrá defectos -uno de los peores, en mi opinión de periodista, consiste en la escasa comunicación que prodigan-. Pero su estrategia resulta clara y coherente.

Marta Jiménez