“¿Para qué se usa? Todo tipo de tareas de montaje y reparación con materiales como madera, yeso, porexpan, DM, Pladur, metal o cerámica. No apto para PE, PP, ni teflón”. El entrecomillado responde literalmente al mensaje de un adhesivo de una primera marca que se puede encontrar hoy en cualquier ferretería o establecimiento de bricolaje. El fabricante debe considerar que cualquier mortal sabe qué es porexpan, DM, PE o PP. Por eso le indica que para unos materiales sí sirve su adhesivo y para otros no. Yo les aseguro que el 99% de los potenciales usuarios de este producto no tienen ni remota idea de qué le están hablando cuando lee tales iniciales o marcas -como es porexpan-. Traigo este ejemplo a colación, pero podría traer otros cientos de casos similares referidos a adhesivos, barnices, imprimaciones, pinturas, tornillos, tacos, plásticos o herramientas.
¿Alguien piensa que cuando un usuario se plantea comprar por primera vez un taladro influye en su decisión la potencia, el número de revoluciones por minuto al que gira la broca o si tiene percusión o inversión de giro? Veamos tres ejemplos cogidos al azar en Amazon, pero que lo mismo podrían estar expuestos en el lineal de cualquier ferretería: Modelo 1: DW511 1/2″ (13 mm) 7,8 Amp Percutor. Modelo 2: 1191VSRK 120 voltios 1/2 pulgada Single-Speed Hammer Drill. Modelo 3: PC700D 7 Amp 1/2 pulgada Taladro de velocidad variable. Evidentemente, con estos datos, al aspirante a bricolador se le disipan todas las dudas. Sale corriendo de la página web o del establecimiento donde se encuentre y se alegra de haber resistido una vez más la tentación de convertirse en un manitas.
¡No nos entienden!, se quejan algunos. Cómo nos van a entender si nos empeñamos en utilizar el lenguaje ingeniero teniendo en cuenta que nos dirigimos a amas de casa, estudiantes, administrativos, abogados, titiriteros y periodistas. Propongo que sea la suegra del ingeniero de turno la que se encargue en cada caso de redactar las instrucciones de uso. En mi humilde opinión, o nos ponemos en el lugar del usuario y hablamos en su idioma o no habrá manera de popularizar el bricolaje, ni ahora ni nunca
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Hola Juan Manuel,
Es lógico que los fabricantes pongan las iniciales de los productos para los que vale y no ese pegamento o lo que sea.
En muchos productos el etiquetado es muy pequeño y supongo que también lo harán para ahorrar espacio, pero para eso estamos los ferreteros, para poder indicarles y asesorarles.