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La importancia de la iluminación en el punto de venta

La importancia de la iluminación en el punto de venta
es total, ya que es un elemento necesario para el funcionamiento de una actividad comercial,
pudiéndose utilizar como promoción, motivación o reclamo para la compra por
parte del cliente.

La prioridad que adquiere una iluminación adecuada y
moderna es cada vez mayor. La luz ayuda a vender. Disponer de una buena y
correcta iluminación incrementa el número de clientes, la cifra de ventas y, lo
más importate, la permanencia en la tienda por parte del cliente, al encontrarse
cómodo. La calidad de luz nos ayuda a conseguirlo.

Los espacios dentro de la tienda deben ser como
escenarios y los artículos, objeto de deseo por parte de nuestros clientes. La
iluminación provoca fijarse en ellos, dando un plus sobre las zonas o productos
bien iluminados. Las técnicas de iluminación, ya sean básicas o provocativas, son
aplicables a cualquier punto de la tienda, también al escaparate donde transmitimos
nuestra imagen y lo que se puede encontrar dentro. Por ello es muy importante
disponer de una calidad y cantidad de luz adecuada. A las acciones temporales
se les debe dar el mismo trato que una permanente o aún más, ya que como tal
hay que potenciar la acción durante el tiempo que dure y con la luz se
consigue.

Hay un concepto muy equivocado sobre los costes que
supone disponer en el punto de venta de una iluminación horizontal constante y
de calidad, siendo un coste muy elevado y negativo disponer de una mala calidad
(luz amarillenta o muy tenue, mucho consumo y poca efectividad, etc.).

Inciden también otros factores negativos que no se
tienen en cuenta, como puede ser lámparas o equipos que radien un exceso de
calor, provocando a su vez más consumo de energía al necesitar más aire
acondicionado. Un consumo eléctrico que no corresponde a la potencia de luz que
emite conlleva un gasto de energía innecesario, mientras que la mala calidad de
reproducción cromática distorsiona y envejece los productos, lo que en más de
una ocasión produce rechazo a la compra por parte del cliente.

En un establecimiento de ferretería y bricolaje, antes
realizar una inversión en iluminación hay que tener en cuenta la cantidad de
zonas a iluminar, si debe haber diferencias de calidad de luz entre departamentos
o secciones, el tipo de luminarias a emplear (de superficie/empotradas) y  los métodos de fijación. En este último caso,
si van suspendidas del techo, se ha de valorar que hay establecimientos, tanto
de ferretería como de bricolaje, con productos a la venta en autoservicio que
son perfiles largos de madera o aluminio que suelen medir unos 2,40 mts. y esto
puede llegar a tocar en algún momento los equipos de luz suspendidos o colgados
del techo y, si no están debidamente protegidos, pueden provocar accidentes.

Es importante poder definir la tonalidad de luz que se
quiere dar al punto de venta, luz cálida, luz fría, etc., al margen de las
necesarias específicas de cada sección. Por ejemplo, hay que tener muy en cuenta
que en la zona de pinturas o de elementos textiles, como estores o cortinas,
los tonos de luz nos harán ver de forma distinta los colores de los productos.

Otro detalle a considerar es saber cuándo se debe
cambiar o sustituir una lámpara. Todas tienen una duración que se mide en horas
de vida, se puede apreciar cuando baja la calidad de luz que emite, la
intensidad de la misma o por que en cualquier momento puede fundirse al haber
llegado al cupo de horas garantizado.

Disponer de una ficha técnica de mantenimiento nos dirá
cuántas horas le quedan a cada lámpara y se debe de tener la precaución de
disponer siempre de lámparas de repuesto para su sustitución inmediata, ya que
la peor imagen de un punto de venta es ver lámparas fundidas o zonas con
intensidades de luz diferentes. Esto produce una mala sensación, que se
transforma en menos ventas. El cliente compra por una gran cantidad de impulsos
y microdetalles, la suma de muchos inciden positiva o negativamente en las
ventas y la luz es uno de ellos.

La palabra ‘ahorro’ en el comercio hay que tenerla muy
en cuenta cuando hablamos de iluminación por muchos motivos, pero el principal
por el consumo diario de energía. Para ello de debe estudiar mucho antes de
hacer una instalación de iluminación las necesidades, pero tanbien los costes, y
es preferible realizar una inversión más elevada inicialmente para ahorrar en
consumos a medio plazo, amortizando la compra de los equipos con más calidad de
luz y menos consumo. También hay que innovar en los nuevos conceptos de
lámparas que van evolucionando muy rápidamente y esto supone analizar las
tendencias y mejoras en cada momento. Hay sectores en los que el tipo de iluminación
marca la diferencia entre una tienda y otra, los establecimientos con grandes
derroches y consumos energéticos que perjudican el medio ambiente no están bien
vistos. Por ello, debemos disponer de un equilibrio entre la necesidad
comercial (impacto, potencia, etc.) y el consumo con sus costes.

Existen muchos tipos de lámparas: incandescente, fluorescencia,
bajo consumo, Led y un largo etc. con una nueva generación de modelos y tipos
de lámparas/equipos basados en el ahorro energético y el poco mantenimiento,
así como en una reducción de coste de los mismos.

Según Peter Boyce (1981,) “la luz hace mucho más que
tornar visibles las cosas. La iluminación de un espacio inevitablemente
contribuye a la creación, en la gente que hace uso de él, de impresiones sobre
ese espacio. Estas impresiones pueden ser buenas o malas, apropiadas o
inapropiadas, definidas o vagas, pero existirán siempre y en todos los casos”

Recomendaciones y sugerencias

  • Analizar la cantidad
    y calidad de luz actual en el punto de venta y la necesidad óptima.
  • Definir la estrategia
    sobre la iluminación deseada para el punto de venta, color, tonalidad,
    fijación, etc.
  • Valorar los consumos
    de energía trimestral y anualmente, para un buen análisis y ahorro.
  • Estudiar los puntos
    débiles de luz en el establecimiento para mejorarlos, esto generará más
    ventas.
  • Modernizar y adaptar
    la iluminación a las tendencias de diseño, tonalidad, etc. del mercado.
  • Conseguir una
    uniformidad de luz en el establecimiento, tanto en cantidad, calidad y
    tonalidad cromática.
  • Los excesos de luz en
    watios de potencia y de consumo son molestos a la vista y aumentan el
    gasto.
  • La iluminación es uno
    de los elementos más importantes en el punto de venta, facilita la
    localización de los productos, al mismo tiempo que crea una sensación de
    comodidad y confort dentro del establecimiento.
  • La inversión en
    iluminación para el punto de venta no es puntual ni única, debe ser
    renovada y adaptada a las necesidades constantes, tanto en tendencias,
    como en las mejoras de ahorro energético.
  • La luz es una
    sensación que se le transmite al comprador pudiendo hacer cambiar su ánimo
    de compra favorablemente.

Antonio Valls, director general de SystemShop Consulting S.L. 

Con más de 24 años de experiencia en gestión e innovación en el punto de venta, Antonio Valls es un apasionado del sector de ferretería y bricolaje.

SystemShop Consulting S.L. es una empresa especializada en la optimización e innovación en el punto de venta (retail). Busca y da soluciones efectivas a cualquier problema: imagen del establecimiento, ‘lay out’, formación del personal, imagen corporativa, gamas de producto, negociaciones con proveedores, gestión de compras, ‘mystery shopper’, implantaciones, iluminación, rotulación y señalización, escaparates, gestión del punto de venta, indumentaria, distribución interior, decoración interior del establecimiento, lógica de funcionamiento…

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Armando
Armando
05/03/2014 00:00

Excelente reporte, felicidades

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