En ocasiones, uno conoce profesionales que multiplican en lugar de sumar; hace no mucho tiempo, un conocido (que espero algún día sea también amigo) me lanzó una frase que se me quedó clavada:
“En los próximos años, no quedará ninguna empresa del suministro industrial con menos de 10 millones de euros de facturación que sobreviva sin fusionarse y ganar masa crítica”.
Fue una afirmación contundente… y, probablemente, cierta, pero no pude evitar sorprenderme. No por el contenido, porque yo opino lo mismo y alimentaba mi “sesgo de confirmación”, lo que me sorprendió fue el importe.
¡¡10 millones de euros!!
Es obvio que, hasta la fecha, ser pequeño podía ser hasta una ventaja, muchas pymes del sector han sobrevivido con márgenes ajustados, un conocimiento profundo del cliente y mucha resiliencia (resiliencia y resistencia).
Pero el entorno está cambiando muy muy rápido: digitalización, automatización, consolidación de clientes, presión de costes, guerra marcas vs distribuidores, globalización, inflación, cambio de hábitos de consumo, geriatrización empresarial… y los que no tengan músculo para invertir o escalar, van a tenerlo cada vez más difícil. Hasta que claudiquen.
La “masa crítica” y el músculo ya no es una opción, es una cuestión de supervivencia.
Y es que alcanzar los 10 millones no es solo una cuestión de tamaño, sino de estructura, visión y capacidad de adaptación.
Requiere pensar más allá del corto plazo, formar equipos preparados para una nueva realidad competitiva y muchas veces, dejar atrás cierta visión artesanal del negocio.
No se trata de crecer por crecer, sino de hacerlo para seguir viviendo.
Mucho tenemos que escalar desde tan abajo, pero con una clara visión y objetivos el camino es más rápido.
Aún y que es totalmente cierto que las empresas pequeñas cada vez lo tendrán más complicado, creo que si que seguirán y serán muchos los Suministros Industriales de facturaciones mucho más bajas de lo que usted propone y seguirán siendo competitivas en el mercado. Tengamos siempre presente que para las nuevas leyes de transición verde el comercio electrónico descenderá y las tiendas físicas ganaran otra vez más presencia, dónde el asesoramiento y el trato personalizado serán los grandes vencedores