No se puede ser tajante a la hora de adjetivar, de ahí que lo de “¿gran? fracaso” esté escrito, a propósito, entre interrogantes. Porque quizás el gran fracaso de El Corte Inglés no haya sido precisamente Bricor, que también; sino el no haber sabido mantener la filosofía de atención al cliente que tenía hace años, aunque de esto ya hablé en su momento (sin ánimo de culpabilizar a los empleados, que conste).
Pero no cabe duda alguna de que la ‘operación Bricor’ de El Corte Inglés no fue precisamente un éxito. Ahí están las cifras: en abril de 2021 hablábamos de 78 establecimientos Bricor en toda España. Ahora, y según la información que publica el propio grupo que preside Marta Álvarez en su página web, sólo quedan 16.
Y, en todo este proceso de ir cerrando centros Bricor, hay algo que me llama la atención y que me apena, por qué no decirlo. Y es que el cierre de cada centro se produce sin pena ni gloria.
Me explico:
Cada vez que entro en la página web de El Corte Inglés para buscar los centros Bricor que continúan abiertos… compruebo alguno que ha desaparecido. De hecho, desde mi última búsqueda, hace un mes, a la de hoy, de 17 centros hemos pasado a 16.
Y lo que me apena es que El Corte Inglés se está ‘despidiendo’ de esta enseña de una manera furtiva; el goteo de cierres se va sucediendo progresivamente sin que se diga nada de ellos, como si nunca hubieran existido.
En su momento, según me recuerdan mis compañeros más veteranos, se presentó como una gran esperanza para convertirse en el contrapeso de las multinacionales del sector del bricolaje. No fue así.
En mi opinión, no se le está dando un final digno a la enseña. No sé qué pensaréis vosotros.
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