El I Congreso sobre Estrategias para la Rehabilitación Energética de Edificios, ERE2+ (11 y 12 de junio), terminó con la conclusión de que la rehabilitación y reforma de edificios y viviendas, junto a la renovación urbana, constituye el centro del cambio de modelo que se debe producir en la industria de la construcción y sectores auxiliares, como la ferretería.
Casi 15 millones de viviendas del parque inmobiliario español se han construido antes de los 80, por lo que no se ha tenido en cuenta ningún criterio de aislamiento y eficiencia energética, tal y como explicó Agustín González, presidente de la Asociación Técnica Española de Climatización y Refrigeración.
Pilar Martínez, directora general de Arquitectura, Vivienda y Suelo del Ministerio de Fomento, hizo hincapié en que las políticas en rehabilitación y eficiencia energética son esenciales tanto para España y los países desarrollados, como para las economías emergentes.
Las medidas legislativas aprobadas o en trámite (incluyendo el Proyecto de Ley de Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbana) pretenden definir una rehabilitación integral, más allá de la energética, que abarque también la flexibilización del uso del edificio y la accesibilidad, y que no pierda de vista los modelos de financiación para emprender estos proyectos, sobre todo buscando un mayor aporte de la inversión privada. El trabajo por hacer es enorme, por lo que “es preciso segmentar el parque edificado para abordar este proceso de rehabilitación y renovación”, comentó Pilar Martínez, que abogó por la colaboración entre Administraciones Públicas, el sector privado y las asociaciones profesionales para facilitar la toma de decisiones a las comunidades de propietarios.