El consumidor con más probabilidades de comprar en tiendas de ferretería y bricolaje se caracteriza por estar en una franja de edad de entre 34 y 55 años, con ingresos bajos o medios y con experiencia en tareas de bricolaje.
Estas son las conclusiones que la consultora USP Marketing Consultancy ha publicado en su último informe sobre canales de compra dentro del sector (datos del segundo trimestre de 2018).
Experiencia en bricolaje
La consultora ha dividido a los usuarios en cuatro categorías, en función de sus conocimientos previos: renovadores, bricoladores ligeros, decoradores y sin experiencia. Los primeros son loa que más visitan las tiendas (un 55,8 %), seguidos por los bricoladores ligeros (47,8 %) y decoradores (40,9 %).
No obstante, los centros de bricolaje se han decantado últimamente por los decoradores y los consumidores inexpertos, que son precisamente los que menos visitan los puntos de venta y menos compran.
Nivel de ingresos
Aunque la renta de los clientes influye menos en si compra o no en las tiendas, sí existe una correlación, según explica USP. A mayor ingreso, menor es la probabilidad de compra. A medida que los ingresos disminuyen, aumenta la posibilidad de que el usuario necesite realizar por sí mismo los trabajos de bricolaje y de que busque productos más baratos y de marca propia.
Edad
Las personas más jóvenes -entre 18 y 34 años- son los que menos compran bricolaje, básicamente porque nunca han realizado este tipo de trabajos. Tampoco los de más edad (a partir de 55 años) que, en cambio, sí tienen gran experiencia. Pero en este caso, suelen subcontratar sus proyectos. Aunque no hay grandes diferencias, sí se aprecia que los consumidores de entre 34 y 55 años son los que más probabilidades tienen de comprar en las tiendas del sector.