Danielino Fernandes es uno de los cerrajeros ‘nuevos’, como él mismo se define, dispuesto a cambiar la cosas en la profesión. También es analista forense en cerrajería, miembro de la junta directiva de la Asociación de Cerrajeros y Seguridad de España (ACSE) y socio de Kodify Cerrajeros.
En esta entrevista para C de Comunicación, que saldrá publicada íntegramente en el número 97 de la Revista de Cuadernos de Ferretería y Bricolaje, repasa la actualidad del sector y algunos de los retos que afronta.
Entre ellos, la última novedad que ha puesto al gremio de cerrajeros en el centro de la actualidad: la decisión histórica de Google de prohibir, a partir del mes de noviembre, los anuncios de cerrajeros en España, algo que ya hizo previamente en otros países europeos.
¿Cuál es la situación actual de la cerrajería en España? ¿Es un mercado en crecimiento?
No tengo referencias sobre mas allá de hace 5 años, cuando empecé en Kodify Cerrajeros. yo me considero uno de los cerrajeros “nuevos”, aunque cada día que pasa tengo más trabajo gracias a las recomendaciones y el “boca a boca”, pero realmente muchos compañeros de oficio que llevan muchos años en el mercado me han dicho que están en declive, puede que esto se deba al intrusismo o a la cantidad de ayuda/tutoriales que se consigue hoy en día en YouTube y redes sociales.
A nuestro parecer es un mercado que evoluciona y se va reinventando, se va actualizando y va mejorando en seguridad, a la par que, con la domótica, va siendo su complemento perfecto. Además, los “amigos de lo ajeno” se van volviendo más sofisticados con herramientas modernas y eso conlleva a que las personas busquen mayor nivel de seguridad en su vivienda, por tanto el cerrajero actual debe ofrecer estos servicios y productos de mayor seguridad y calidad.
¿La cerrajería de seguridad en España cuenta con el suficiente respaldo de autoridades y administraciones públicas?
No, para nada. Es una profesión que no está reglada, no existe una formación profesional, no hay subvenciones para el cerrajero, no hay una colegiatura u organismo de regulación.
Aunque durante la pandemia fuimos considerados una profesión de emergencia y nos permitían trabajar y movilizarnos, no hay ningún tipo de ayudas o permisos poder aparcar en zonas de carga/descarga, doble vía, línea verde o azul en casos de emergencias…
No existe ni un epígrafe correspondiente para poder darse de alta ni convenio para el cerrajero técnico de aperturas y seguridad, tenemos que acogernos a un epígrafe globalizado junto a la carpintería y otros oficios similares.
Las asociaciones de cerrajeros llevan desde hace años en pie de guerra frente a las prácticas de empresas multiservicio que consideran abusivas por las tarifas que cobran a los usuarios. ¿Cómo podría explicar el problema y de qué forma impacta al cerrajero profesional?
Muchas de estos servicios abusivos son realizadas por estafadores. Les llamo así porque es lo que hacen, estafan, van con prácticas desleales y jugando con la desesperación y miedo del cliente. Desde mi punto de vista, afecta a nuestra imagen y a nuestro oficio.
Las personas cuando oyen la palabra cerrajero ya se llevan las manos a la cabeza pensando que van a tener que desembolsar una gran cantidad de dinero. Es una imagen que nos afecta a todos porque no es real.
Los cerrajeros que trabajamos con honestidad no vamos dando “palos” por ahí. Pero también nos desmarca de ese tipo de empresas, ya que los clientes nos conocen pueden contar con nosotros y no tener que llamar a esas empresas abusivas.
La entrevista íntegra se publicará en el número 97 de la Revista Cuadernos de Ferretería, a la que podrá accederse en formato digital en los próximos días.
Estamos muy de a cuerdo con lo que dice pero gente como esta GRAN persona QUEDAN muy pocos.
De los que tenemos por la zona y alrrededores TE calcan que dan miedo, nosotros por suerte tenemos un GRANDISIMO equipo de profesionales muy buenos.