El Gremio de Ferretería de Cataluña ha celebrado este pasado jueves 18 de julio, el primer encuentro de mujeres del sector de ferretería y bricolaje, en el Hotel Qgat, ubicado en Sant Cugat del Vallès (Barcelona).
La jornada contó con más de 40 invitadas y sirvió como punto de encuentro para debatir sobre los retos y desafíos a los que se enfrentan las mujeres en el sector, así como para compartir experiencias y vivencias.
Además de llevarse a cabo un networking donde las ferreteras pudieron charlar e intercambiar ideas y conocimientos en un ambiente distendido, el encuentro contó con la presencia de la coach y formadora de equipos Beti Costillas, quien animó a las presentes a exponer sus distintas opiniones a través de preguntas que debían contestarse en grupos para después debatir entre todas.
“Un encuentro necesario”
Todas las asistentes coincidieron en lo útil y enriquecedor que ha resultado el evento, ya que supone una forma de dar voz a las mujeres ferreteras y una manera de demostrar que éstas tienen mucho que ofrecer, además de poder aprender de otras compañeras con más experiencia y plantear distintas ideas que hagan prosperar al sector.
En el coloquio se pronunciaron términos como “empoderamiento”, “ilusión” y “futuro”, lo que demuestra que las mujeres tienen un hueco muy importante en el sector de la ferretería y bricolaje, sin olvidar aspectos importantes a tener en cuenta como la vida personal, conciliación y la salud mental.
En la jornada también se debatió sobre los retos a los que se debe hacer frente, como el absentismo laboral, la dificultad de atraer y retener talento, y la competencia que suponen las grandes superficies para el pequeño comercio. Además, se hizo hincapié en la importancia de que los medios de comunicación visibilicen esta realidad, para que poco a poco se derriben los prejuicios y se conozcan las historias de más mujeres.
Todas las presentes derrocharon optimismo, vocación e implicación por el sector de ferretería y bricolaje a través de sus negocios y coincidieron en que este encuentro debe ser el primero de muchos, ya que, como alguna exclamó “no nos pararán”.