Iberflora volvió a abrir sus puertas ayer en una edición presencial muy esperada por el sector de la planta y flor, el paisajismo, la tecnología y el bricojardín. Una edición en la que, además, se celebra el 50º aniversario del certamen.
La feria se está celebrando hasta el próximo día 7 en Feria de Valencia, y en total hay más de 30.000 metros cuadrados de exposición, repartidos en tres pabellones, donde se dan cita alrededor de 400 firmas (procedentes de Alemania, Francia, Holanda, Italia, Portugal, Rusia o Turquía), y este año, además, se han incorporado 40 expositores nuevos, de los que 19 son extranjeros.
La inauguración corrió a cargo del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y durante la misma el director de Iberflora, Miguel Bixquert, destacó que, “con la pandemia, la gente tuvo que quedarse en casa, y las plantas, las terrazas y los jardines se convirtieron en un lugar de desconexión”, lo que ha hecho que el sector haya tenido “los mejores ejercicios de los últimos 20 años“.