En los últimos meses, la multinacional ha salido de otros mercados europeos, y ha completado adquisiciones en los mercados portugués y norteamericano.
El Grupo Sant-Gobain ha informado de que ha firmado un acuerdo vinculante para la venta de todas sus marcas comerciales en el Reino Unido al Grupo Stark.
Según el comunicado difundido por Sant-Gobain, que deja por tanto de distribuir en Reino Unido, los activos que se han vendido (600 puntos de venta con 8.900 empleados) generarán unos ingresos de alrededor de 2.700 millones de euros en 2022, con un margen operativo de alrededor del 2 %.
La operación se completará en el primer trimestre de 2023, según lo previsto, “y no está sujeta a condicionantes externos”, remarcan desde Sant-Gobain.
“Esta desinversión forma parte de la estrategia continua de optimización del perfil comercial de Saint-Gobain, para potenciar el crecimiento y la rentabilidad del Grupo”, concluyen desde la compañía.
Venta de activos en toda Europa y nuevas adquisiciones
Precisamente en el marco de ese plan estratégico para potenciar el crecimiento y la rentabilidad del Grupo, la multinacional ha efectuado más operaciones de desinversión (es decir, de venta de activos) en los últimos meses.
En abril ya vendió su negocio de distribución en Polonia a la compañía polaca 3W; en mayo hizo lo propio con IDS, su distribuidor especializado en suelos, encimeras y laminados en el Reino Unido, y con sus negocios de fabricación de vidrio en Austria y Alemania.
Pero, por otro lado, también ha llevado a cabo un proceso de adquisiciones, como por ejemplo la compra, en mayo, de las compañías lusas Fibroplac y Falper, para acelerar su crecimiento en Portugal; y la adquisición, ese mismo mes, de Kaycan, fabricante y distribuidor de materiales de construcción en Canadá y Estados Unidos.
