Brico Depôt, cadena de centros de bricolaje del grupo Kingfisher, ha logrado en España, durante el segundo trimestre de 2017, unas ventas de 92 millones de libras (alrededor de 100 millones de euros), según datos de la propia multinacional británica.
Esto significa un incremento del 1,7 %. No obstante, en el lado negativo, esta cifra supone un decrecimiento del 6,5 % en moneda constante (eliminados los factores de inflación o deflación). Ya en el primer trimestre las ventas de Brico Depôt en nuestro país subieron por encima del 6 %, pero en moneda constante esto representó una caída del 2,9 %.
El comportamiento de Kingfisher en general sigue la misma tónica. La facturación ha ascendido a 3.148 millones de libras, un 4 % más, pero en moneda constante la bajada ha sido del 1,7 %. Por enseñas, B&Q continúa ofreciendo resultados negativos en Reino Unido e Irlanda, con un descenso del 7,8 % en moneda constante. A la cabeza sigue Screwfix, con un fuerte incremento del 17,2 %. Por países, también Polonia mantiene la primera posición, con un 5 % de subida.
Véronique Laury, directora general de Kingfisher, asegura que el segundo trimestre “ha seguido un curso similar al primero”. Sin embargo, en el caso de B&Q, esta enseña se ha visto afectada por “las oscilaciones estacionales” en ambos periodos de tiempo. El grupo puso en marcha recientemente su nueva estrategia ‘One Kingfisher‘. Esta disponibilidad del producto unificado y único “se aproxima ahora a los niveles normales”, según palabras de Laury.
