Desde el 17 de marzo hasta el próximo 5 de abril Amazon ha inhabilitado la posibilidad de hacer envíos a sus centros logísticos. La plataforma de comercio electrónico toma esta medida, comenta, para dar prioridad “a productos de primera necesidad (alimentos, productos para el hogar, suministros sanitarios y otros productos de gran demanda), con el objetivo de hacerlo llegar a los clientes lo más rápido posible”.
Desde que se impuso el estado de alarma, Amazon ha experimentado un aumento de pedidos, “por lo que ciertos productos básicos para el hogar y el cuidado personal no están disponibles”. Ante ello, explica, el e-commerce está “priorizando la entrada de productos básicos para el hogar, los suministros sanitarios y otros productos de gran demanda que llegan a nuestros centros logísticos para poder recibir, reabastecer y entregar estos productos a los clientes más rápido”.
Así pues, la compañía informa a las empresas que venden sus productos a través de su plataforma que de forma temporal pausa los envíos de productos que no sean productos de primera necesidad y por ello ha ampliado los plazos de envío y entrega de algunas órdenes de compra existentes. Por ello, recomienda a las empresas que envíen sus productos “al final de la ampliación del plazo”.
Sí y no tienen en cuenta como repercute el COVID 19 al respecto de los envíos de sus vendedores y penalizan la calidad de su cuenta ante retrasos y cancelaciones. No han tomado medida alguna por este problema. Se ve que es problema que no va con ellos.