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Arregui: purificador de aire germicida Respirae

Por Ángeles Moya
Está certificado y validado por el Departamento de Inmunología, Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina y Enfermería de la Universidad del País Vasco, de acuerdo con la norma europea ISO 15714:2019.

Arregui ha dado el salto al sector de la Bioseguridad y ha lanzado al mercado un purificador de aire germicida, diseñado específicamente para combatir el COVID-19. Respirae, que así se llama este nuevo producto, destruye virus, bacterias, hongos y demás microorganismos patógenos existentes en el aire mediante luz ultravioleta UV-C.

El purificador, desarrollado y fabricado íntegramente en Arregui, cuenta con la certificación y validación del Departamento de Inmunología, Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina y Enfermería de la Universidad del País Vasco, de acuerdo con la norma europea ISO 15714:2019.

Respirae es apto para todo tipo de espacios (hogares, oficinas, consultas, comercios, bares y restaurantes, aulas, gimnasios, etc.) y está disponible en tres acabados (blanco, negro y roble/negro), para integrarlo fácilmente en cualquier decoración. Está recomendado para estancias de hasta 50 metros cuadrados, aunque su resultado más óptimo se da en espacios entre los 12 y 35 metros cuadrados.

Además, Respirae cuenta con las siguientes ventajas:

  • Eficacia demostrada, con una efectividad del 99,99 %. Destruye virus del tamaño del coronavirus (0,12 micras).
  • Funciona con luz ultravioleta de onda corta (UV-C), tecnología reconocida y avalada por estudios científicos, y utilizada en numerosos ámbitos (por ejemplo el hospitalario, para desinfectar quirófanos) para eliminar toda clase de virus y bacterias.
  • Seguro: Su utilización es 100 % segura, ya que la luz no se radia al exterior del aparato. Respirae cumple con la norma UNE0068 para seguridad de equipos con luz UV-C.
  • Su uso es compatible con la presencia de personas, animales y plantas, a diferencia de otros purificadores como los de ozono, que deben utilizarse con las estancias vacías porque es una sustancia nociva para la salud.
  • Sin filtros. Respirae elimina los virus y no los acumula, lo que evita su manipulación a la hora de cambiar y desechar los filtros.
  • Sin mantenimiento. La lámpara UV-C tiene una duración de 9.000 horas (aprox. 3-4 años), lo que supone un ahorro importante respecto a los purificadores con filtros que hay que sustituir cada pocos meses.
  • Sin instalación. Enchufar y listo.
  • Ligero. Sus dimensiones y sus 8 kg. de peso hacen que sea muy cómodo para transportar y mover de una estancia a otra.
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