Año nuevo, pero otra historia tantas veces repetida. La falta de relevo generacional es una expresión tan manida como real. Tan real que adopta nombres propios, como el de Ferretería Villarejo, un negocio centenario de Bembibre (León), que ya prepara su cierre definitivo. Será este sábado 4 de enero.
A partir de este día, la ferretería que abrió sus puertas en los bajos de plaza Mayor en 1919 -pese a que el origen de la empresa, Almacenes Villarejo, se remonta al siglo XIX- pasará a integrarse en el Edificio Villarejo, que albergará un centro cultural.
“Es una pena, pero no puedo hacer nada. Siento bastante nostalgia, llevo 41 años aquí“, recuerda estos días, para una radio local, José Manuel Otero Rincón, actual propietario -junto a su mujer María Delia- de la ferretería donde comenzó a trabajar en 1982 como mozo de almacén y hoy conocido entre el vecindario como ‘Pepín Villarejo’.
Su ferretería, pero antes la de Victorina Villarejo y Bernardo Alonso Villarejo, guarda hoy mucha de la historia de un negocio que llegó a convertirse en una referencia de la localidad y donde los clientes acudían, como de costumbre en una ferretería, a comprar de todo.
Porque dentro de esas paredes todavía se conservan productos ya descatalogados, por no decir olvidados. Porque en ese establecimiento, recuerda José, se llegaron a vender andadores o almadreñas de madera que se utilizaban entonces para sortear el barro de calles sin asfaltar.
En nombre de Ferretería O Grove, expresamos nuestra solidaridad con Ferretería Villarejo por su cierre. Entendemos la nostalgia y la pérdida que esto supone para la comunidad. Valoramos la tradición y el servicio que ofrecen las ferreterías locales y nos comprometemos a seguir trabajando para mantener vivo ese espíritu. Deseamos lo mejor a José Manuel y María Delia en esta nueva etapa.