Eurobrico, la feria internacional del bricolaje, finalizó el pasado viernes 3 de octubre, dejando en general buenas sensaciones entre expositores y visitantes. Han sido tres días en los que el sector de ferretería y bricolaje ha presentado diferentes propuestas, tanto por parte de los fabricantes y proveedores, como por parte de la distribución.
En este sentido, la feria ha sido reflejo de las preocupaciones de las marcas por ofrecer soluciones innovadoras a las necesidades de los usuarios finales y también de los distribuidores, con nuevas presentaciones para el punto de venta.
De forma especial, destaca la puesta en escena de Ferrokey, la renovada cadena de ferreterías que está impulsando Comafe, la cooperativa madrileña. En su estand, de original diseño, se pudieron apreciar los ejes principales de esta cadena, con un modelo de ‘conseguidor’ (mesa táctil que permitirá a los clientes de las tiendas ver todo el catálogo de productos disponible en la cooperativa y realizar la compra online, entre otros) y algunos artículos de sus tres marcas propias. Luis Rubio, director comercial de Comafe, expuso en la feria las ideas principales acerca de la sociedad actual, aspectos que resultan fundamentales para orientar los puntos de venta.
En Eurobrico ha estado casi toda la distribución del sector: Leroy Merlin, Bricor, Bauhaus, Akí, ATB, Bricogroup, Bricoking, Cecofersa, Comafe, NCC (Cofedas, Synergas, QFplus, Coinfer, Coanfe, Las Rías), Profer, Unifersa, BdB… y muchos detallistas: Fita Ibicentro, BricoFermín, Madriferr, Ferrokey Villaviciosa, Rodilla, Útiles, Toolbox, BrikoAtlántico, BricoSoriano, Dalpes, etc. También estuvieron presentes numerosos socios de Coinfer y Comafe -que fletó un autocar desde Madrid-, entre otras organizaciones.
La celebración conjunta del certamen con Iberflora también ha favorecido la presencia de centros de jardinería por los pasillos, con Jardinarium y Jardiland a la cabeza.
Entre los proveedores, como siempre, hay opiniones para todos los gustos, si bien prevalecen las de aquellos que se muestran satisfechos con la calidad de las visitas recibidas. Incluso hay quien destacó la presencia de algunos compradores internacionales, que en anteriores ocasiones se había echado en falta. No obstante, la feria tiene que seguir trabajando en este aspecto.
En resumen, a falta de cifras oficiales, parece que esta edición de Eurobrico ha cumplido con sus objetivos: facilitar las relaciones entre proveedores y distribución, ser el punto de encuentro del sector de ferretería y bricolaje y reforzar el sentimiento de recuperación del mercado.
